Has de saber que en mi memoria
reside el sabor de tu beso,
la firma que tu labio ha impreso
en los confines de mi historia.
No sé si es pronto, o ya es tarde,
para perderme en tus abrazos,
para recoger los pedazos
del amor que en mí aún arde.
Si piensas en mí todavía
rescataré del Hades mi alma,
regresará otra vez la calma
a esta constante noche fría;
y si un haz -desde tu mirada-
brilla sobre mi incertidumbre,
haré de tu amor mi costumbre
y de mi pecho haré tu almohada.
Has de saber que hoy volvería
a imaginar nuestro futuro,
juntar mi cuerpo con el tuyo,
soñar contigo esta utopía;
que volveremos a encontrarnos
solos, y en este mundo incierto,
que la esperanza aún no ha muerto
y vivirá, mientras queramos.
Samuel Álvarez Conejos
Hermosa poesía, Sam y muy esperanzadora...un placer volver por aquí y leerte...
ResponderEliminarBesotes
Encantado de poder leer a partir de ahora maravillas como estos lindos versos. Nos leemos compañero :)
ResponderEliminarGracias Aitor, un placer la visita.
EliminarAbrazo,
Sam